El verano ya está aquí y nos acompañará en todos los días -y las noches- de los próximo tres meses. ¿Eres de esas personas que cree que dormir bien y descansar en verano es casi una misión imposible? Si la respuesta es ‘sí’, esto te interesa. ¡Y es que hoy te damos los mejores consejos para dormir bien en verano!
Las altas temperaturas de la estación estival no son un factor que ayude a conciliar el sueño. A esto suele sumarse que en las vacaciones y nos alejamos de la rutina y las horas de descanso comienzan a ser mucho más flexibles. Es por ello que, en muchas ocasiones, dormir es mucho más difícil de lo que parece. Sin embargo, sí hay una serie de consejos que puedes seguir para ahuyentar el insomnio en los meses de verano. ¡Aquí te los damos!
1. Acondiciona tu dormitorio
Como es lógico, uno de lso factores más importantes a la hora de dormir bien en verano es que nuestro dormitorio sea cómodo, confortable y fresco. La temperatura ideal que debería tener la estancia es de 22 y 25 grados centígrados. Si tienes aire acondicionado, esto es mucho más fácil, pero recuerda que la corriente de aire nunca debe llegarte de manera directa. Si no tienes aire, lo mejor que puedes hacer es bajar las persianas durante el día, ventilar el dormitorio al atardecer y utilizar un ventilador acompañado de un recipiente con agua y hielo para que refresque la estancia.
2. Refréscate
Date una ducha tibia antes de ir a la cama. Aunque parezca paradójico, el agua fría puede activar nuestro cuerpo antes del momento de descansar y está totalmente contraindicada.
3. Evita dar vueltas
Canto más te muevas en la cama, más calor sentirás. Es por ello que, aunque sabemos que es muy difícil, no debes desesperarte y comenzar con el ritual de las vueltas en la cama. Si eres de los que necesita taparse, que sea con sábanas de algodón y dejando los pies fuera. La mejor postura para dormir mejor cuando hace calor es de costado, porque una menor superficie de tu cuerpo tendrá contacto con la cama.
4. Apaga las luces
Y haz lo mismo con los electrodomésticos y accesorios eléctricos que no necesites, como cargadores u ordenadores. Tanto la luz como los aparatos eléctricos, que consumen mucha energía, son una fuente de calor que te impedirá dormir bien en verano. Así que aléjate de ellos todo lo que puedas en las noches de descanso.
5. Reduce la deshidratación nocturna
Gánale a la deshidratación tomando un vaso de agua antes de dormir. La transpiración y el constante movimiento en la cama pueden generar deshidratación, por lo que conviene ingerir algo de agua previamente.